En la entrega pasada hablamos del aspecto físico y mental pero es muy importante también el ámbito académico y todo lo que viene después del examen. Qué hacer en estos momentos?
En el aspecto académico:
Mantente al día con la fecha de entrega y prepárate para los dos escenarios. No es sano pensar “no aprobaré” o en su defecto “estoy seguro que he aprobado”, como bien decíamos hay que estar preparado para ambos escenarios y ser realistas. Adicionalmente, no le des tantas vueltas al examen en tu cabeza luego de haber salido del salón, evita discutir por días con tus compañeros sobre esto, recuerda que ya en este punto (donde ya lo entregaste) no puedes controlar los resultados, por eso mismo “relajate”.
Consejo Post-Examen:
Haz planes para un posible escenario en caso de que los resultados no sean los esperados, habla con tus padres desde antes y mantenlos al día, en muchos casos ellos te pueden ayudar a controlar la ansiedad.
No dejes que el estrés gane, prepárate para el examen, preséntalo y no dudes que el esfuerzo siempre se sobrepone a las condiciones que puedan afectar tus calificaciones. La verdadera clave es ocuparse y no preocuparse.